domingo, 28 de diciembre de 2014

Restaurante Gastrobar LAGASTRO

Plaza de San Francisco, 3.
Jaén.
No se si recordaréis queridos lectores que el pasado día 10 de diciembre tuvimos el placer de asistir como invitados a la inauguración  de este exclusivo establecimiento, y la verdad es que fue una autentica sorpresa y un éxito en todos los aspectos. Buenos anfitriones, buena bodega, buenas viandas y mejor aún ambiente. Pero nos quedaba la prueba de la verdad, la puesta en escena en condiciones diarias normales de trabajo, presión y exigencias de una clientela que espera mucho de este local. 
Llegamos dos parejas a comer el 28 de diciembre, día de los inocentes, que venía que ni pintado para alguna anécdota gastronómica. Primero fueron una cañas de espera en el gastrobar de la planta baja, hasta tener la mesa preparada (unos minutos) y ya directamente al comedor que se encuentra en la planta superior. Nos encontramos con una multitudinaria comida de compañeros de Navidad y eso nos dio que pensar en que quizás los tiempos entre platos no iban a ser los adecuados para nuestra reunión. Sin embargo nada más lejos de la realidad, la encargada de sala nos tomó nota inmediatamente de la bebida, en la que nos dejamos aconsejar por dos magníficas cervezas de mayor graduación que las normales a la venta, una llamada La Flaca y otra La Gorda, ¿cual creéis que tenía más graduación?

Tras la simpática y refrescante bebida, tanteamos con mucha tranquilidad la carta, pues es para pensarlo dos veces, ya que cuenta con platos y productos de gran originalidad, todo gracias al reputado y experto chef  D. Manuel Frutos, ganador de diversos premios, sobre todo en la especialidad de paellas, lo que hace plantearte una y otra vez qué tomar. Desde los entrantes a los primeros y las sugerencias se nos antojaba todo. Para más nivel aún, los camareros y el propio chef no hizo ascos ni pegas a acercarse por propia iniciativa para ayudarnos en tan deseable elección gastronómica. Por fin, unos entrantes compuestos de carpaccio de buey con notas de geles dulces, mermelada de manzana, y el verdadero Parmesano por supuesto. Tras esta delicia en boca, que acompañamos con un Ribera del Duero Pruno, delicioso por cierto, seguimos con una ensalada de la Gallina de los Huevos de Oro, templada y muy agradable. Por fin los platos principales que fueron desde un excelente atún rojo con cocción Tataki y reducción de salsa de soja y wasabi, una excelente paella de arroz meloso con sepia que hizo que todos probásemos el plato con el consiguiente saqueo al comensal que se lo tomó con mucha filosofía y agradabilidad, no le quedaba otra. Otro plato fue una excelente cazuela de anguilas, con setas y huevo cocido posiblemente en Ronner a 63 grados, que presentó en una preciosa vasija con tapa de barro y que tenía un deseable toque de ahumados. Otra genialidad de este joven chef.
Dado el nivel y placer de la comida, nos dejamos arrastrar por la propuesta del chef a la que llamó postre Paranoia, que curiosamente tenía diversas texturas de cholocate, brownie, tierra de chocolate, helado, y unos pequeños algodones dulces de color fresa que hicieron que recordásemos un día cualquiera en la feria.
Los precios muy acordes con la gran calidad y los tiempos muy correctos. Que más se puede decir, salvo que pasó con creces para nosotros el "examen" y que tenemos ante nosotros una sólida alternativa gastronómica de alta calidad y que estoy seguro no pasará mucho tiempo sin que sea distinguida al más alto nivel. Suerte a la nueva familia de jóvenes restauradores. GLC.





INAUGURACION

Hoy nace en el panorama gastronómico un nuevo restaurante que se suma ya a la excelente oferta gastronómica de Jaén. Le deseamos mucha suerte y éxitos a los nuevos restauradores. GLC. 10 de diciembre de 2014